miércoles, 26 de diciembre de 2018
Etapa final
En 1959 la fundación Guggenheim me otorgó una beca que me trasladó a Nueva York a vivir durante dos años. En noviembre de 1961 viajé a España y permanecí allí hasta 1963, año en el que me trasladé a Brasil.
Hasta la muerte de mi marido Timoteo en 1977 alternábamos nuestra residencia entre Río de Janeiro y Madrid, pero finalmente mi hijo y yo nos trasladamos a Madrid en 1981 gracias a la campaña que se realizó en España para repatriar a intelectuales.
La propuesta de volver a España la acepté ya que me aseguraron un trabajo para mi hijo, lo cual no se cumplió y anduvimos mal económicamente. a raíz de esto yo me busqué la vida como pude para poder pagar los gastos de mi casa y aceptase cualquier oportunidad para ganar algo de dinero como dar pequeñas conferencias.
Finalmente fallecí el 27 de julio de 1994 en Madrid pero fui enterrada en Valladolid, en mi cuidad natal.
Finalmente fallecí el 27 de julio de 1994 en Madrid pero fui enterrada en Valladolid, en mi cuidad natal.
domingo, 16 de diciembre de 2018
martes, 4 de diciembre de 2018
Continuación de mi vida
En la Escuela de Bellas Artes de San Fernando fue donde comencé a entablar amistad con Valle-Inclán, al igual que con el pintor Timoteo Pérez Rubio.
Gracias a esta etapa de mi vida, me pude casar en 1921 con el pintor Timoteo y pude tener un hijo con él, al que llamamos Carlos. No hay que olvidar que fue mi marido quien salvó el patrimonio del Museo del Prado durante la Guerra Civil ya que trasladó las obras de arte a Francia para que no fuesen destruidas.
Vivimos los primeros años de nuestro matrimonio en Roma, gracias a una beca de estudios concedida por la Academia de España a Timoteo.
Al estallar la Guerra Civil Española, en 1936, mi marido se alistó voluntario en el ejército y a la vez que firmé el Manifiesto de los intelectuales antifascistas, colaborando con la prensa republicana y trabajando como enfermera. a pesar de que mio hijo era aún muy pequeño, viajé a Barcelona, Valencia y luego a otros países como Francia, con una breve etapa en Grecia.
Gracias a esta etapa de mi vida, me pude casar en 1921 con el pintor Timoteo y pude tener un hijo con él, al que llamamos Carlos. No hay que olvidar que fue mi marido quien salvó el patrimonio del Museo del Prado durante la Guerra Civil ya que trasladó las obras de arte a Francia para que no fuesen destruidas.
Vivimos los primeros años de nuestro matrimonio en Roma, gracias a una beca de estudios concedida por la Academia de España a Timoteo.
Al estallar la Guerra Civil Española, en 1936, mi marido se alistó voluntario en el ejército y a la vez que firmé el Manifiesto de los intelectuales antifascistas, colaborando con la prensa republicana y trabajando como enfermera. a pesar de que mio hijo era aún muy pequeño, viajé a Barcelona, Valencia y luego a otros países como Francia, con una breve etapa en Grecia.
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